Digamos a dios que nos salve de su creación, hablaré con una piedra por si esta es la hija de nuestro señor, le rezaré esperando mi muerte o mi salvación y dedicaré mi vida a ello. Me vestiré con harapos para que los futuros obispos puedan gozar de una vestimenta, un cetro y un hogar dignos para quienes rezan a una piedra y al padre de esta. Crearé disputas territoriales y religiosas, más tarde, me uniré a una monarquía que se apodere de todos los privilegios, y más adelante, me unificaré a la política, por lo tanto al estado y al bando militar. Jugaré un papel fundamental para la pedofilia, comeré la comida que defiendo para los hambrientos, me llenaré de oro mientras hay una crisis mundial y cambiaré la biblia a medida que la ciencia me va destapando el plan.
La misma mierda con diferente idioma, diferente etnia y color de piel.
Sid Trip
0 comentarios