A veces me cambian de habitación a una más lujosa, todas las paredes acolchadas para que pueda saltar y dormir donde quiera. Me ponen una vestimenta la cual hace que no me arañe, dicen que me dé un abrazo a mi mismo mientras ellos me atan unas hebillas por la espalda, así podré amarme más. En muchas de las ocasiones cuando salgo a pasear me dan unos caramelos con sabor a menta, y después no tengo ganas de nada, ni el cuerpo me responde. El insomnio hace que pierda la noción del tiempo, las personas de blanco nunca me lo dicen y no paran de reírse, les pongo contentos.
Pero hoy están tristes ya que no me verán más.
Sid Trip
0 comentarios